sábado, 8 de abril de 2006

Chocolat

Se auguraba una velada de las que hacen época en ... si ... el Rey Castro otra vez. Ya nos habiamos olvidad de lo dificil que es tomar una copa sin que te envenen y de la ineludible presencia de 'La Cacho'. 'La Cacho' es al Rey Castro, lo que Psicosis Gonsales al Berlín Cabaret pero elevado a la máxima potencia. Más ordinaria, más gorda, más de todo.

La noche prometía que ricos los mojitos. Fueron dos los que me tomé antes de la cena. Luego todo empezo a ir mal. . Ufff, que mala estaba la degustación de platos cubanos. Allí se quedo casi toda. Era para dos personas y ni nuestro ilustre riojano ni yo pudimos darle salida. Así que me concentre en los postres .. y fui a pedir ... el 'Timbal de Tres Chocolates'. Que inconsciencia la mía. Estaba rico pero era la sustancia comestible de más complicada digestión que existe en el planeta. Que momentos pase amigos, goloso de mi, me lo zampé entero. Necesite de todas mis fuerzas, me faltaba el aire, casi me da un corte de digestión, se me dispararon las pulsaciones, tuve que salir a la calle a que me diese el aire. Todo un amarillo de chocolate.

La noche ya se torció ... y a duras penas me fui recuperando. Nuestros amigos versionables se dieron el piro como siempre y allí se quedo el equipo ROMO aguantando el tirón.

Parece mentira, pero aguanté para tomar unas copas, bailar un ratito y moverse entre el ganao.

No se si volveré a beber, lo que es seguro es que no vuelvo a hacer postre.

- el apenao -

1 comentario:

Anónimo dijo...

Pero hijo Richard que acabaito que estás. ¿No te acuerdas que ese postre me lo pedí yo con vosotros y era como comer nocilla a cucharadas?
Me parece que voy a tener que volver allí a poner orden en el Rey Castro que os estais viniendo abajo