viernes, 10 de octubre de 2008

Del paraiso a Babilonia

Un paraiso, o casi. Yo, como siempre tan optimista, en lo que me da por pensar es en lo cerca que esta de arruinarse. Han sido 5 noches estupendas en Ko Phi-phi, y ya me esta empezando a costar pensar que sitios me han gustado mas de todo el viaje. Cada nuevo lugar parece mejor que el anterior.

Ko Phi-phi son en realidad dos islas, Lee y Don (grande y peque~a respectivamente). Solo hay hoteles en la primera, la segunda se puede visitar en barca de popa larga
(el taxi local que se ve en la foto). Islas de cuento, paraisos cada vez menos perdidos y devueltos un poco a su estado original por el tsunami de hace unos a~os. Vuelve sin embargo la fiebre constructora y la explotacion intensiva de estas islas en la que no existen vehiculos a motor (salvo las embarcaciones) y donde el tiempo esta detenido en un verano eterno de fiesta en la playa a la luz de la luna. Normalmente hasta ahora eran las fiestas de la luna llena, pero he podido comprobar que sombrereros locos ya reparten panfletos para celebrar los cuartos crecientes.

?Mas detalles? Bungalow a 50 metros de la arena y hamaca a la puerta por apenas 10 euros la noche. Temporada baja y buen tiempo. Cenas estupendas y extra picantes (a pesar de que el camarero/due~o insista en que esta sirviendolas con la mitad picante, vale mas pedirlas con un cuatro) en el minusculo y escondido restaurante Papaya por menos de 3 euros. ?Que mas se puede pedir?

Por pedir nada mas, bueno, nada mas salvo no pasar por una intoxicacion (creo que fue eso) por algo que comi el tercer dia (no fue en el Papaya). No se que demonios seria, pero me tuvo fuera de combate casi un dia y medio. Una lastima. Ya tardaba en pasar, mira que no he tenido problemas en todo el viaje. Quizas es que me estoy volviendo mas aventurero para las comidas, y hace casi un mes que no piso un local de comida rapida y me he acostumbrado a puestos callejeros y restaurantes fuera de ruta (gracias a la colaboracion escocesa, tambien hay que decirlo).

Salvo este incidente, que me a ayudado a contribuir aun mas a ensuciar la isla, todo ha sido perfecto. Mira que no me gusta la playa, pero es alucinante la pinta del agua, lo agusto que se esta a la sombra de las palmeras, lo facil que es echarse al mar con unas aletas y unas gafas y ver centenares de peces de todos los colores. Me he quedado con ganas de salir con un kajak a explorar algunas de las calas de la isla o hacer una inmersion pero ya con oxigeno y toda la pesca (nunca mejor dicho). El dia que me pase encamado ha impedido que explore un poco mas, y ademas no me he traido el carnet PADI (aunque de todas maneras me da que aqui te ponen a bucear en unos minutos sin titulo ni nada).

En toda la isla solo hay: restaurantes, escuelas de buceo, tiendas de baratijas, hoteles/hostales y puestos de tatuajes y masajes tailandeses. Por cierto que no tiene precio (si que lo tiene, 10 euros) mas de una hora de masaje tailandes (no es lo que pensais cochin@s, es mas una paliza de muay thai que un masaje) en la playa que se ve aqui al lado.

Ya lo que faltaba a de ginda al pastel es ponerle hermosos atardeceres en los que el sol se esconde por el mar o las colinas de la isla. Se puede subir a un montecillo (muy bien indicado como via de escape en caso de tsunami) desde el que se observa la puesta de sol perfectamente. Eso si, hay que estar dispuesto a pegarse con unos cuantos por una buena posicion para la foto y no ponerle pegas a hacer de fotografo para los demas. En cualquier caso vale mas sentarse y difrutar, bien untado de antimosquitos que suelen preferir esta hora y las canillas como momento y lugar de ataque.

En resumen. Un escandalo, ya sea para venir en parejita o con los amigorros a montarla buena. Hay un par de locales que merecen la pena al pie de la playa. El que mas he frecuentado es Hippies, con musica en directo (anglo-popera como era de esperar). hay muchos otros similares y en casi todos ellos tienen un espectaculo nocturno de malabares con fuego que no esta nada mal (ojo que no se os quemen las pesta~as que a veces fallan en la suelta).

Ahora, mas triste que un torero tras el telon de acero, tecleo esto desde Bangkok. Todo un cambio en menos de 12 horas. Bullicioso, contaminado, ruidoso, decenas de nacionalidades y de vicios por satisfacer. Quizas me meta en un curso. Si tuviera una moneda de tres caras seria para decidir entre cocina, lucha o masaje tailandes.

_robisoncrusoe_

3 comentarios:

Srta. Amapola dijo...

Babilonia es Bangkok?
Qué bonito todo, es como las imágenes de los documentales ._.

Ricardo dijo...

Pues un poco si, sobre todo comparado con la tranquilidad anterior. Es una licencia poetica ... permitaseme. ;)

Anónimo dijo...

Colaboración escocesa?? Uuummm!!! :-)